Últimamente me ronda por la cabeza la idea de volver a estudiar francés. Luego lo descarto, por falta de tiempo, porque sé que siempre me meto en más cosas de las que puedo llevar. Pero sigo dándole vueltas y pensando que tras las vacaciones de Navidad me traeré en la maleta mis Bescherelle para comprobar si es solo un deseo pasajero.
Y es que Francia, el francés, el estilo parisino, son pura inspiración. Despreocupado pero elegante, cultural. Porque no es algo que sea vea solo en la ropa; se palpa en ciertas librerías, en los cafés, en conversaciones interesantes o en una canción de Edith Piaf. Se nota en el menos es más, en la calidad versus la cantidad. En la actitud.
Ya sea Jane Birkin, Françoise Hardy o Coco Chanel. Porque como decía Inès de la Fressange en su conocida guía de estilo "No es necesario haber nacido en París para tener el estilo de una parisina".
Para poner música al estilo os recomiendo la lista de Alba Galocha en Spotify, una española muy parisina.